Infiltraciones de corticoides | Clínica IVEMA Valencia
El dolor lumbar es una de las principales causas de consulta médica en todo el mundo y afecta tanto a jóvenes como a adultos mayores. Cuando los tratamientos convencionales como analgésicos, fisioterapia o reposo no ofrecen el alivio esperado, las infiltraciones de corticoides se convierten en una opción efectiva. Este procedimiento mínimamente invasivo busca reducir la inflamación y mejorar la calidad de vida de quienes padecen dolor en la espalda baja.
En este artículo te explicamos cómo funcionan las infiltraciones de corticoides para la columna, qué beneficios ofrecen, cuánto dura el efecto y qué riesgos debes tener en cuenta antes de someterte a ellas.
¿Qué son las infiltraciones de corticoides en la columna?
Las infiltraciones de corticoides son inyecciones aplicadas directamente en la zona afectada de la columna vertebral, generalmente en el espacio epidural o cerca de las raíces nerviosas. El medicamento más utilizado es un corticoide de liberación prolongada, que actúa reduciendo la inflamación y calmando el dolor.
Este tratamiento se recomienda principalmente en casos de:
Hernia de disco lumbar.
Ciática o dolor que se irradia a las piernas.
Estenosis del canal lumbar.
Inflamación en las raíces nerviosas.
Dolor lumbar crónico resistente a otros tratamientos.
¿Cómo funcionan estas infiltraciones?
El mecanismo es relativamente simple pero muy efectivo:
Acción antiinflamatoria: el corticoide bloquea los mediadores que producen inflamación alrededor de los nervios de la columna.
Reducción del dolor: al disminuir la inflamación, los nervios dejan de estar comprimidos, lo que alivia la sensación de dolor y hormigueo.
Mejora de la movilidad: al disminuir la molestia, el paciente puede retomar actividades físicas y rehabilitación de forma más cómoda.
Generalmente, se aplican con ayuda de técnicas de imagen como la fluoroscopia o ecografía, lo que permite localizar con precisión el punto exacto de la inyección.
Beneficios de las infiltraciones de corticoides
- Alivio rápido del dolor lumbar y ciático.
- Permiten evitar o retrasar una cirugía de columna.
- Procedimiento ambulatorio, sin hospitalización.
- Mejoran la calidad de vida y la movilidad.
- Facilitan la recuperación en programas de fisioterapia.
¿Cuánto dura el efecto de una infiltración?
El alivio del dolor puede sentirse desde las primeras 24-48 horas tras la infiltración y durar entre semanas y varios meses, dependiendo de cada paciente. En algunos casos, una sola infiltración es suficiente; en otros, pueden ser necesarias varias a lo largo del año.
Preguntas frecuentes
1. ¿Duelen las infiltraciones de corticoides en la columna?
Se realizan con anestesia local, por lo que solo se percibe una leve molestia durante la inyección. El procedimiento suele durar menos de 30 minutos.
2. ¿Cuántas infiltraciones puedo hacerme al año?
Generalmente, no se recomienda superar las 3 infiltraciones en un mismo año en la misma zona, para evitar efectos secundarios a largo plazo.
3. ¿Puedo volver a mis actividades normales después?
Sí. El paciente puede caminar y hacer vida normal tras la infiltración, aunque se recomienda reposo relativo durante las primeras 24 horas.
4. ¿Curan definitivamente el dolor lumbar?
No. Las infiltraciones no curan la causa del dolor, pero ayudan a controlarlo y permiten que otros tratamientos, como la fisioterapia, sean más efectivos.
5. ¿Quién no debe recibir infiltraciones?
Pacientes con infecciones activas, alergia a los corticoides o alteraciones graves de la coagulación deben evitar este procedimiento.
